Quiero hacer un Testamento ¿Qué opciones tengo?


Son muchas las personas que se plantean la posibilidad de plasmar su voluntad en un documento legal, llamado testamento. No es necesario que la persona sea de edad avanzada, o que se encuentre en una situación crítica.
En realidad, esta opción es la mejor manera de asegurarse el cumplimiento de nuestra voluntad, independientemente de nuestra situación actual.

En España existen tres tipos distintos de testamentos comunes.
El primero de ellos es el testamento abierto. Se le llama así porque implica manifestar la voluntad directamente ante la persona que va a otorgar el testamento (generalmente, el Notario). Es el tipo más frecuente y también el que más garantías ofrece.

Por otro lado, también existe el testamento cerrado. Al igual que el anterior, se realiza ante Notario, sólo que en este caso no se conoce la voluntad del interesado, porque se encuentra recogida en un sobre cerrado.
La desventaja de esta opción radica en que no se puede conocer si lo escrito cumple todos los requisitos exigidos. Efectivamente, la Ley establece qué condiciones deben darse para que un testamento se considere válido, circunstancia que no podremos saber hasta que se abra el sobre que lo contiene.

Por último, una tercera modalidad es la llamada testamento ológrafo. Se le llama así porque se encuentra escrito del puño y letra de la persona que lo otorgó. Es recomendable que a la hora de su redacción se cuente con el asesoramiento de un abogado, ya que así nos aseguramos de que cumpla los requisitos necesarios. A diferencia de los anteriores, este testamento no se presenta ante Notario: queda en manos de quien lo escribió, o de otra persona autorizada, hasta el fallecimiento del causante.

Si a pesar de lo descrito desea información adicional, le invitamos a que se ponga en contacto con nuestros abogados de Santander (Cantabria), son expertos en Derecho de Familia y Sucesiones.

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